Si a tu hijo le ofreces de forma regular la posibilidad de aprender otras cosas, le estarás dando oportunidades para que tenga éxito y obtenga conocimientos. Este es uno de los ingredientes clave para que gane confianza en sí mismo y esa es una de las piedras angulares de la felicidad. Cada tarea que tu hijo aprende y que luego se compromete a hacer le dará el valor necesario para encarar una tarea más difícil.
La oportunidad de hacer cosas nuevas da a los niños la oportunidad de sentirse bien consigo mismos. Inculca a tus hijos la necesidad de explorar siempre algo nuevo: probar comidas distintas, seleccionar nuevos amigos, animarse a subir a un tobogán más alto, etc. Explícale a tu hijo que aun cuando siempre existe la posibilidad de que las cosas no salgan bien, si no se arriesga un poco, hay muy pocas o nulas posibilidades de éxito. Deja que los niños experimenten en un ambiente seguro, y como padre, intenta no intervenir ya que esto ayudará a aumentar su autoestima. Por ejemplo: si tu hija o hijo está intentando montar un juguete y se frustra por no poder hacerlo, debes dejarle hacer para que él consiga solito ese objetivo. El solo hecho de decir “yo lo hago por ti” puede crear dependencia y disminuir la confianza de la niña o el niño. Aún así, si ves que el niño o la niña no lo va a poder conseguir, ofrécele tu ayuda para explicarle cómo hacerlo, pero en la medida de lo posible, deja que el niño participe lo máximo posible para que pueda interiorizar la situación como un logro personal. Lo importante es que los niños y niñas pequeñas asuman riesgos que les lleven a aprender y a mejorar y ganar en autoestima.